Si sientes que el dinero no te alcanza para nada puede ser porque, sin darte cuenta, desembolsas más de lo que deberías, al realizar gastos que podrías evitar.
Para que esto no te pase y puedas crear un hábito de ahorro mediante el buen manejo de las finanzas personales, puedes probar el Kakeibo, un antiguo método japonés para ahorrar dinero.
Kakeibo significa “libro de las finanzas del hogar” y es una técnica que ha ganado popularidad en la época actual, pues es tan sencilla que para aplicarla no necesitas más que papel y pluma.
A inicios del siglo XX, la periodista Motoko Hani dio a conocer esta técnica, con el objetivo de ayudar a las amas de casa a llevar mejor las finanzas del hogar, hacer rendir el dinero y tener lo suficiente para poder ahorrar.
El Kakeibo consiste en una libreta donde se registran todos los gastos mensuales, para tomar conciencia de ellos y tener un balance respecto a los ingresos. Así, al inicio de cada mes se debe anotar los ingresos y gastos fijos y, a la par, establecer una meta de ahorro.
Luego, cada día hay que registrar los gastos, los cuales se agrupan en cuatro pilares:
Supervivencia: Gastos realmente necesarios, como alimentos, medicinas, artículos básicos de higiene, transporte y los gastos fijos de la casa, como renta, agua, electricidad y gas.
Entretenimiento y cultura: Gastos que se generan por las actividades culturales y recreativas que realizas, como ir al cine, teatro, museos y conciertos, así como la compra de periódicos, revistas y libros.
Opcionales: Son los gastos que no son indispensables, pero sueles hacer. En caso de tener que recortar el presupuesto, es en este apartado en donde debes poner atención. Aquí entran las salidas a comer en la calle o a beber a un bar, comprar ropa y zapatos y, también, cuando renuevas tus gadgets o aparatos electrónicos y electrodomésticos.
Extras: Se trata de los gastos imprevistos, y van desde la reparación de algo (que sí es necesario arreglar) hasta la compra de regalos de cumpleaños o Navidad (que no necesariamente debes adquirir). Al igual que los opcionales, suelen ser gastos no indispensables (salvo las reparaciones) y es otro rubro en el que puedes ahorrar.
Al llenar cada mes tu libreta podrás darte cuenta de cuánto dinero mensual tienes disponible, cuánto gastas en ese período, qué cantidad se va en los gastos fijos, de cuáles egresos puedes prescindir y cuánto quieres ahorrar.
La idea es estar siempre consciente de cuánto tienes y en qué se va. Así podrás establecer objetivos de ahorro claros y realistas, que te serán más fáciles de alcanzar.
Según aquellos que han probado esta técnica, los logros de ahorro mensual ascienden hasta un 35% de tus ingresos; ¡nada mal! Así que el Kakeibo es un método que vale la pena probar.
Si el papel y pluma no te motivan del todo, puedes comprar un libro Kakeibo, que es como una agenda donde ya vienen impresas las fechas de cada día y los campos que debes llenar.
Y si eres más tecnológico también hay aplicaciones, que no son precisamente de Kakeibo, pero se basan en el mismo principio del registro de ingresos y gastos y la división de éstos en categorías, para establecer objetivos de ahorro.
Una de las aplicaciones más recomendables en este rubro es Mobills Finanzas Personales, pero hay más opciones, también muy útiles. Aquí hay algunas apps para hacer rendir tu quincena.