La saga Terminator ha sido una de las más exitosas de Hollywood, así que seguro que sabes de qué estamos hablando cuando mencionamos a Skynet. Si no has visto Terminator: Salvation (2009) tampoco te pierdes gran cosa, pero en aquella película salían unas motocicletas autónomas y militarizadas que perseguían por la carretera a los protagonistas de la película.
Guardando ciertas similitudes con las motos malvadas de la superproducción y con la motorización eléctrica, los vehículos no tripulados y sistemas de conducción autónoma a la vuelta de la esquina, Charles Bombardier (sí, el ingeniero y propietario de Bombardier y quien diseñó la moto aérea Sonic SX) ha esbozado Interceptor, su idea acerca de las motocicletas policiales de vigilancia y persecución.
Según Bombardier “un solo agente de policía podría supervisar en el futuro cinco unidades de Intercerptor, que pueden estar vigilando las ciudades durante las 24 horas del día todos los días, además y mediante una aplicación podrían atender avisos de los ciudadanos de manera automática. El diseño de estas motos de policía ya existe y podrían ser realidad muy pronto”.
Continuaba diciendo en sus declaraciones a la CNN que “es sólo la evolución natural de la tecnología. Las cámaras de tráfico llevan funcionando durante muchos años y este concepto es sólo su paso de un punto fijo a uno móvil. Con los avances en tecnologías para vehículos no tripulados podemos ofrecer nuevas soluciones a las necesidades básicas de los ciudadanos, incluyendo la seguridad pública”.
Estos vehículos de dos ruedas emplearían el espacio destinado para el conductor para alojar un paquete tecnológico muy futurista con varias cámaras panorámicas 3D de 360º, dos giroscopios con motores eléctricos capaces de mantener la moto en pie sin asistencia, un paquete de baterías colocado muy cerca del suelo, un motor eléctrico que entregaría su fuerza a la rueda trasera y un sistema de frenada regenerativa.
La empresa encargada del desarrollo de estas nuevas ideas es Imaginactive, una sociedad independiente sin ánimo de lucro que propone ideas sobre cómo serán los vehículos del mañana y cómo se enfrentarán a los retos que nos presenta el futuro.
En lo que al tráfico se refiere, podría convertirse en una herramienta similar a las que utilizan los ayuntamientos de grandes ciudades como Madrid para la regulación de las zonas de estacionamiento regulado. Además el sistema informático de estos drones podrían emitir de forma automática multas o citaciones judiciales si procediera, tanto en formato físico como telemático. Además de las labores típicas de vigilancia, estos drones pueden patrullar las calles recogiendo las placas de matrícula pudiendo localizar a los delincuentes o infractores en tiempo real según se lancen las incidencias al sistema.
Bombardier también apuntaba que el mayor reto que suponen estos vehículos no tripulados es que “requieren una gran inversión, aproximadamente de 5 millones de dólares sólo para acercarse mínimamente a ser una realidad, así que esta idea necesitaría el apoyo de las autoridades. En definitiva la idea de Imaginactive es trabajar hacia unas ciudades menos contaminadas en el futuro, más seguras y con menos accidentes de tráfico gracias a que los vehículos inteligentes podrán detectar fallos técnicos que puedan provocar los accidentes y así evitarlos”.
Además, Charles Bombardier también está trabajando junto al diseñador brasileño Eduardo Arndt en la creación de una segunda motocicleta policial sin conductor, la Bridgade. El principio es el mismo: un vehículo de alta movilidad y alta eficacia con cámaras de vigilancia, pero en este caso dotado de un sistema de propulsión basado en pila de combustible (hidrógeno).
Seguramente tardemos bastante en ver siquiera un prototipo de alguna de estas motos, pero igual los cacos pueden empezar a pensar en cómo hacer sus trapis cuando lleguen estos patrulleros a las calles.