“Dentro de seis meses viene mi artista favorito en concierto, ¿compramos entradas?”. “Sí, claro. Avísame cuando salgan a la venta”. Y pasaron los días, las entradas se agotaron y lo único que queda es la rabia de no haberlas comprado el mismo día que salían a la venta. Situaciones como esta ocurren a diario y no hay más culpa que la propia por no haber sido previsores. ¿Solución? Sí. A veces ayuda tirar de refranero y aplicárselo porque no hay por qué dejar para mañana lo que pueda hacerse hoy.
El valor de anticiparse a los hechos radica muchas veces en reducir el nivel de incertidumbre y de estrés, pero también de arrepentimiento por no haber preparado algo con tiempo aun sabiendo que existía un amplio margen. Cada septiembre, cuando termina el verano, cientos de miles de personas se plantean llegar a la operación bikini del próximo año con cierta previsión pero acaba ocurriendo lo de siempre: el toro llega en mayo pillando a todos con la misma figura que tenían hace ocho meses. Eso sí, con unos cuantos euros menos que habrán invertido en un gimnasio que se ha pisado dos veces. En casos como este sí que es cierto que también juega un papel importante la fuerza de voluntad.
Al final, la lista de asuntos previsibles sigue aumentando, pero nunca se le da salida o solución. Seguiremos haciendo la maleta la noche antes de emprender el viaje, compraremos los regalos de Navidad dos días antes -y eso que ahora con el Black Friday es más accesible dejar todo comprado en noviembre-, seguiremos tomando los yogures los días inmediatamente posteriores a su fecha de caducidad y llegaremos al supermercado a hacer la compra con hambre y sin lista.
¿Y si hablamos de jubilación? Por muy joven que uno sea, y dado que actualmente en España no llegamos ni a dos afiliados a la Seguridad Social por cada jubilado, nadie garantiza poder cobrar una pensión llegado el momento. Por eso hay compañías como CNP Partners, que en colaboración con Morningstar, ofrece tres planes de pensiones diferentes que se adaptan a las diferentes capacidades de inversión: renta fija mixta, renta variable mixta y renta variable. Gracias a un simulador de pensiones, es posible calcular el capital acumulado en base al tipo de cartera -conservadora, moderada o dinámica- y a los años de inversión.
En este sentido, los planes de pensiones CNP Partners en colaboración con Morningstar, permiten que se puedan diseñar según el perfil del contratante y atendiendo al grado de riesgo que uno está dispuesto a asumir. Para tomar decisiones como esta siempre hay detrás un equipo de expertos en análisis para la inversión que asesoran al cliente para que encuentre la máxima diversificación y la mayor reducción de costes posibles según su caso. Porque con el futuro no se juega.